viernes, 4 de noviembre de 2016

vida!

Mi mano temblorosa sujeta la flor 
mecida por el viento

Momentos de VIDA!
Un minuto, una hora
un día, una semana, un mes
un año, el primer diente…
Seis años, un colegio.
Catorce años, un trabajo y
otra escuela de noche.


Todo lo que se la VIDA! me lo enseñó. Aprendí siempre de ella.
A mis 73 años, aún estoy aprendiendo cada día.
La VIDA! es un aprendizaje constante, continuo.
Agradezco a la VIDA! todo lo que me ha dado. Sin sus enseñanzas no sería lo que soy.
Era un 10 de mayo del 2001 cuando la VIDA!  Me regaló un diagnóstico, que acabó con mi incerteza de saber lo que me pasaba.
Salí contento, conformado, lo que cambiaría mi VIDA!
Una ELA me acompaña hace quince años, ella y yo somos uno, vamos cogidos de la mano día y noche, con tan pesada carga me pasan los días, casi igual que de niño, por no decir más aprisa, si VOLANDO!
De la ELA aprendí a valorar más los momentos, estos son únicos, plenamente VIVIDOS!
Aguantar los embates de mi ELA, las perdidas con dignidad, VIVIENDO! cada momento como si fuera el último.
Mi ELA es longeva en el tiempo, la cual estoy sumamente agradecido.
Quince años vividos, como si fueran toda una VIDA!
Mi ELA evoluciona, cual ladrona silenciosa, siempre está ahí, robándome, el placer de andar, obsequiándome con la torpeza en mi cuerpo, llevo setenta y cinco caídas contabilizadas.
¿Acaso uno se cae sino se pone erguido? Me caí por qué andaba.

Ahora las últimas me caigo sin apenas andar, al ponerme de pie, al cambiarme de silla, un desequilibrio a “besar los suelos”, ayudas para levantarme y los golpes son muy dolorosos, en un cuerpo magullado y atrofiado por los robos de la ELA. Josep 
La rosa esa bonita flor, sin embargo contad tiene espinas como la misma VIDA! 

continuación hoy 05/11/2016

Hoy la gran familia de la ELA esta de luto, Jano Galan nos ha dejado, luchó como todos por VIVIR! Nuestra ELA no perdona, hasta dejarnos fundidos como la cera de una vela. E.P.D.

el camino que tomamos
para hacer un paseo.
tímidamente...
los arboles pierden la hoja,
y ya es otro otoño.
jrrof

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